Entre élites y revueltas. Lecturas tras 12 días de paro

Entre élites y revueltas. Lecturas tras 12 días de paro
Instituto de estudios ecuatorianos
Martes, 12 Noviembre 2019

Foto: Luis Herrera R. Coop Docs

A nivel regional diversos países evidencian las consecuencias sociales de las políticas económicas y sociales impulsadas por las élites nacionales articuladas al capital trasnacional y los lineamientos del FMI a cargo de gobiernos que responden a los intereses de los grandes empresarios.

En el caso de Ecuador el malestar se evidenció luego de que el pasado 1 de octubre , cadena nacional el Presidente Lenín Moreno dio a conocer un nuevo paquete de medidas económicas y laborales que despertaron el descontento general de la población, la cual se expresó masivamente con 12 días de paro y lo que para muchos fue el segundo levantamiento indígena, que aviva la memoria popular del primer levantamiento en los años 90.

Si bien el gobierno sabía perfectamente que las medidas afectarían a la gran mayoría de la población, no previó que los niveles de descontento generarían una protesta de la magnitud que se vivió. Días antes del anuncio oficial, el vicepresidente Otto Sonnenholzner dijo que el problema económico del Ecuador aún no había sido resuelto y pidió a la ciudadanía comprensión, alertando ya el contenido de las medidas.

En un intento por disimular el carácter pro élite y antipopular popular, el Presidente inició su discurso señalando que no subiría el impuesto al valor agregado (IVA). En los días previos se había informado que se estaba analizando una subida de la tarifa actual del 12% al 15%, con el respectivo impacto que este tipo de impuestos regresivos tienen, en una economía dolarizada, para el bolsillo de las y los ecuatorianos en un país cuyos precios ya son bastante elevados. Los medios de comunicación afines al gobierno, presentaron la noticia en primera plana bajo el titular: “Lenín no subió el IVA”.

Inmediatamente después, Lenín Moreno anunciaba una serie de medidas entre las cuales figuraba la eliminación y liberación de los subsidios al diésel y la gasolina por medio del Decreto Ejecutivo 833. No subió el IVA pero si el combustible, que tiene un gran costo en vida del común de la población; especialmente para los y las campesinas, los y las trabajadoras y particularmente las mujeres populares que son las más afectadas con las crisis económicas.

Moreno, insistió en que todos (hablando en masculino) debemos poner de nuestra parte ya que el Estado está cumpliendo su trabajo mediante la reducción de costos. ¡Para ejemplificarlo, presentó como logro de su gestión el haber dejado a 23.000 personas sin trabajo !. Y con el fin de seguir reduciendo la masa salarial, informó que los contratos ocasionales se renovarán con un 20% menos de remuneración y que las vacaciones se reducirán de 30 a 15 días al año en el sector público.

Estas medidas, que de manera simultánea tiran a la baja los sueldos del sector, también resultó mayores facilidades para que los empleadores pueden prescindir de sus trabajadores y contratarlos de manera ocasional, utilizando mecanismos como el teletrabajo que reduce costos operativos (para los empresarios) al tiempo que aumenta el ejercito de reserva vía el despido de miles de trabajadores del Estado anunciado por el Ministro de Finanzas, Richard Martínez, y el Ministro de Trabajo, Andrés Madero, quienes informaron de la decisión de despedir a 10.000 trabajadores antes de que termine el año.

Aquí los grandes beneficiarios son sin duda los grandes empresarios que pueden “reducir costos”, incrementando la explotación laboral, en un claro retroceso de los derechos laborales adquiridos.

En caso, no es el único beneficio que las medidas traen para las élites, también, se anunció la devolución automática de tributos para exportadores y la eliminación del anticipo del impuesto a la renta.

Este paquete de medidas es la continuidad de una política en beneficio de los grandes grupos económicos, hoy dictan las políticas del Estado mediante una captura corporativa del mismo, colocando a sus representantes en puestos claves dentro del gobierno.

Bajo el argumento de requerir una inyección de recursos para afrontar el déficit fiscal en el marco de una crisis auto-provocada, el gobierno de Moreno firmó un acuerdo con el FMI, sin que este pasara por la Asamblea Nacional, siendo una violación de los artículos 289, 419 y 438 de la Constitución, y cuyo contenido no ha sido transparente a la sociedad.

Al igual que ocurrió en épocas pasadas, el desembolso de fondos viene acompañado de una serie de condicionamientos y políticas económicas y fiscales que el gobierno de Lenín Moreno comenzó a aplicar incluso antes de la firma del acuerdo. Esta alianza con las élites y el FMI pudo ver claramente el año anterior con la promulgación de la “Ley Orgánica para el fomento productivo, atracción de inversiones, generación de empleo, estabilidad y equilibrio fiscal” en la cual, entre otras cosas, el Gobierno perdonó a los grandes conglomerados empresariales 4.295 millones de dólares de deuda al fisco para pasar a obtener un desembolso del FMI por 4.200 millones de dólares. 

El 2 de octubre , los transportistas llaman a un paro y el 3 de octubreel Ecuador amanece paralizado y con cortes de calles. Los estudiantes universitarios y los colectivos de mujeres también se auto convocaron contra el paquetazo. Las movilizaciones que comenzaron desde la mañana hacia el centro histórico de Quito, fueron creciendo gracias a la participación de hombres y mujeres que llegaban en su mayoría sin banderas, pero movidas por el rechazo a las medidas anunciadas. Las manifestaciones se regaron por todo el país: en las provincias de Cotopaxi, Pichincha, Loja, Manabí, Imbabura, Chimborazo, Azuay, Zamora Chinchipe, Pastaza, Tungurahua y Santa Elena, se registran varios cortes de carreteras y movilizaciones mientras que en Guayaquil, la ciudad del futuro, inició los saqueos. La reacción del gobierno, cuyo eslogan principal supuestamente es el diálogo,

Ese mismo día el Ministro de Finanzas, Richard Martínez, el Secretario de la Presidencia, Juan Sebastián Roldán, y el Ministro de Trabajo, Andrés Madero, dieron más detalles sobre las medidas económicas anunciadas el día anterior y señalaron la decisión de despedir a 10.000 trabajadores más, para reducir la masa salarial del Estado.

El Ministro Martínez, afirma que de no mantenerse el decreto que elimina los subsidios y se aplican las medidas de ajuste se pone en riesgo la dolarización. Martínez quien antes de ser ministro presidía el Comité Empresarial Ecuatoriano, agita el fantasma de la dolarización pero no dice nada de los riesgos que trae para la misma, el compromiso del Gobierno con los grandes grupos empresariales a los que él responde, de eliminar gradualmente el Impuesto a la Salida de Divisas (ISD), herramienta que ha sido determinante en el control de la fuga de capitales y la estabilidad de la dolarización.

Las medidas fueron defendidas por sus principales beneficiarios, así mediante un comunicado las Cámaras de la Industria y la Producción dejan sentado su respaldo a las medidas del Gobierno al tiempo que acusan a las acciones de protesta de intentos desestabilizadores y piden a las fuerzas de seguridad que garanticen el orden ya los municipios, acciones urgentes para la movilidad.

El 4 de octubre , a pesar del Estado de Excepción, las jornadas de protesta se incrementan en todo el país. Mientras, las cámaras de la Industria y la Producción respaldan las medidas del Gobierno en virtud de la estabilidad económica del país, el manejo responsable de las finanzas públicas y de la estabilidad democrática; acusan a las acciones de protesta de intentos desestabilizadores; piden a las fuerzas de seguridad que garanticen el orden y los municipios, acciones urgentes para la movilidad.

El 5 de octubre , aunque los transportistas levantaron el paro, las protestas y manifestaciones en todo el país continúan, lo que evidencio que no era una protesta únicamente de transportistas. Lo que aparentemente comenzó con un paro de transporte y protesta estudiantil en realidad fue el germen de una protesta desde abajo, el descontento de los sectores populares y las comunidades indígenas y campesinas desbordo incluso a las propias dirigencias. El movimiento indígena llama a una gran movilización para el 9 de octubre en la ciudad de Quito y las caravanas, provenientes de las distintas comunidades indígenas, emprendieron su marcha a la capital.

El gobierno decide trasladar la sede de gobierno a la ciudad de Guayaquil mientras en Quito, Las universidades y organizaciones de la ciudad se alistaron para recibir la llegada que comenzó a llegar la noche del 7 de octubre . La marcha fue recibida con aplausos, a su paso tanto por el norte como por sur de la ciudad, para concentrarse en el Parque El Arbolito y el Ágora de la Casa de la Cultura Ecuatoriana.

El 8 de octubre , en el parque, se montaron carpas y espacios de ayuda humanitaria y de comida, y los estudiantes de medicina de distintas universidades brindaban atención médica. Si bien la gran marcha siguiente estaba convocada para el día, el enojo por la violencia desplegada y la falta de una salida clara del conflicto caldearon los ánimos y un desordenado intento por tomar la sede de la Asamblea Nacional endurece la represión incrementando el número de muertos a 7.

El 9 de octubre organizaciones sociales, indígenas, mujeres, sindicatos y estudiantes se reunieron en una gran marea pacífica que colmo la avenida 10 de agosto y entró al centro histórico de Quito. Durante la mañana en Asamblea los Pueblos y Nacionalidades designaron a la guardia indígena la tarea de controlar cualquier intento de vandalismo, misión que la guardia llevo a cabalidad, aunque se registraron algunas tensiones con la policía que nuevamente apeló al uso de los gases lacrimógenos.

El 12 de Octubre , en la mañana una marcha de mujeres salió desde el Parque El Arbolito y dio la vuelta por la avenida Naciones Unidas, en su camino la marcha pacífica y colorida fue creciendo y trasladando la protesta a un sector de la ciudad característico de clase media, media alta. En su camino se cruzó con caravanas de los barrios populares de Quito que venían a pie a unirse al Paro. La marcha de mujeres realizó un acto de profundo simbolismo en la estatua dedicada a Isabel La católica, recordando el 12 de octubre como un día de resistencia. Mientras cada vez más personas llegaban desde los barrios de Quito al Parque El Arbolito donde los niveles de represión crecían de manera desmedida. En un confuso episodio donde el gobierno, casualmente deja desprotegida la contraloría la misma es incendiada.
El gobierno ante la imposibilidad de controlar el aumento del descontento declara el Estado de sitio en la ciudad. La gente se dispersa pero en la noche la ciudad entera hace oír sus cacerolas, primero desde las ventanas y luego desde las calles de todos los barrios.

El 13 de octubre la zona que rodea la Casa de la Cultura parece un escenario de Guerra, el gobierno llama al diálogo y el movimiento indígena acepta bajo la condición de que el mismo sea transmitido en directo. Producto del diálogo se levanta el paro con el compromiso del gobierno de derogar el decreto 833.
A un mes de los hechos, los 12 días que duraron las movilizaciones hay al menos 5 cuestiones que se han cristalizado con claridad y que a más de una semana de levantado el paro, en un contexto donde las demandas no han sido verdaderamente acogidas al punto de hacer inviable la continuidad de dialogo, vale la pena revisar:

1- La decisión por parte de los pueblos indígenas de ejercer de los Derechos Colectivos establecidos en la Constitución de la República Art. 1, 98, 171, art. 57 y el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo en su artículo 26.2. y art. 30.2, cuando ante la brutalidad de la represión y en aplicación de este conjunto de normativas que les concede la autoridad en sus territorios legalmente reconocidos y tierras comunitarias de posesión ancestral y limita las actividades militares en sus territorios la CONAIE decide declarar el Estado de Excepción en los territorios indígenas y advirtieron a los militares o policías que si decidían ingresar a sus territorios serian retenidos y sometidos a la justicia indígena. Bajo estas reglas en diversos territorios militares y especialmente policías fueron retenidos mientras reprimían las poblaciones. Aunque todos los uniformados fueron cuidados, alimentados y devueltos en perfecto estado, desde el gobierno se habló de secuestros y se iniciaron procesos judiciales. Las cuales se incrementaron tras las desacertada forma de expresarse del presidente de la CONAIE Jaime Vargas, a quien los medios y el gobierno sacaron de contexto cuando llamo al pueblo indígena a crea su propio ejército en referencia a la guardia indígena, para poder cuidarse de la represión desmedida.

2- El nivel de cohesión entre élites económicas, políticas, gobierno y medios de comunicación, explica como un gobierno logra sostenerse a base de represión, ante una protesta masiva y nacional de los niveles vistos durante 12 días en Ecuador. Las élites, que en décadas anteriores mantenían pugnas internas de poder en tanto su capacidad de lobby e influencia sobre el Estado representa un elemento central para garantizar su acumulación, hoy muestra un grado de cohesión novedoso que trasciende las diferencias entre los distintos partidos de derecha. Lenín Moreno hace el trabajo sucio, las élites lo sostienen para que resista los embates del descontento popular que generan sus medidas. Moreno prepara el camino para sus sucesores de derecha, así expresa que cuando llegue el momento, él estará allí para apoyar a quienes según él, serán los futuros presidentes del Ecuador, el banquero Guillermo Lasso y Jaime Nebot Representante del Partido Social Cristiano, responsable del periodo más oscuro y represivo vivido en Ecuador, quien dejó al descubierto su profundo racismo cuando ante la llegada del movimiento indígena a la ciudad de Guayaquil , junto a la alcaldesa de su mismo partido, Cynthia Viterí llaman a la ciudadanía a defender a Guayaquil y no permitir la entrada de indígenas. Allí Nebot ante las cámaras de televisión recomendó a los indígenas "que se queden en el páramo". junto a la alcaldesa de su mismo partido, Cynthia Viterí llaman a la ciudadanía a defender a Guayaquil y no permitir la entrada de indígenas. Allí Nebot ante las cámaras de televisión recomendó a los indígenas "que se queden en el páramo". junto a la alcaldesa de su mismo partido, Cynthia Viterí llaman a la ciudadanía a defender a Guayaquil y no permitir la entrada de indígenas. Allí Nebot ante las cámaras de televisión recomendó a los indígenas "que se queden en el páramo".

"Somos como la paja de páramo que se arranca y vuelve a crecer ...
y de paja de páramo sembraremos el mundo"

Dolores Cacuango - histórica líder indígena

 

En un contexto de fuerte captura corporativa del Estado, donde las élites no solo influyen sino que ejercen directamente al gobierno, se establece una estrategia de desarrollo asociado al capital extranjero bajo la premisa de atraer inversiones y mantener las “ventajas comparativas” mediante la reducción de los costos laborales y las cargas impositivas. De este modo, los grupos económicos, que representan la sociedad entre el capital trasnacional y las élites locales, buscan limitar la capacidad de decisión de los Estados periféricos en cuanto a las líneas estratégicas de su política económica y social mediante la firma de tratados de comercio que consolidan y procuran tornar irreversible esta estrategia (Basualdo y Arceo, 2006)

3- Las políticas de ajuste neoliberal y las directrices del FMI entran por las buenas o por las malas.
Los gobiernos, cuya hegemonía se pone en entredicho ante el masivo descontento social está dispuesto a sostener su dominio mediante el uso de la fuerza. La aplicación de una desmedida fuerza represiva, que pudimos ver los 12 días de manifestaciones y que mientras se escriben estas palabras se está replicando en el vecino país de Chile da cuenta.

El mecanismo para justificar la represión en largamente conocido, infiltrados de las mismas fuerzas de seguridad provocan desmanes, contagian a los más jóvenes a desenfrenar su bronca, dejan zonas sospechosamente liberadas como fue el caso de la contraloría, y luego descargan toda su violencia bajo el argumento del vandalismo asociado a las movilizaciones.

Los niveles de impunidad garantizados por el Estado les permitieron incluso reprimir cuando los mismos manifestantes les estaban brindado alimentos o tirar gas lacrimógeno al interior de las universidades que funcionaban como centros de Paz e incluso en la Maternidad Isidro Ayora y el Hospital Eugenio Espejo.

Lenín Moreno, no cuestionó a la policía por la violaciones a los derechos humanos cometidas sino que defendió a capa y espada –sobre todo espada- su accionar. A pesar de los 10 muertos en la ciudad de Quito, más de 1340 heridos, 1121 detenidos reportados por la Defensoría del Pueblo; el pedido de Amnistía Internacional a la Organización de Estados Americanos para 'exigir' a Ecuador una investigación sobre la "represión violenta" durante las manifestaciones, el gobierno optó por organizar un banquete en el palacio de Carondelet en homenaje a la policía durante el cual el presidente Moreno señalo que la policía ejerció una violencia con “excesiva generosidad”.

Estas acciones de respaldo hay que leerlas en conjunto con, la renovación de la cúpula militar, la cual reprimió con la suficiente firmeza que esperaba el gobierno y las diferentes declaraciones, especialmente de los Ministros de defensa Oswaldo Jarrín y de Gobierno María Paula Romo -quienes a pesar de los fuertes cuestionamientos fueron ratificados en sus cargos- que anuncian un fortalecimiento de la fuerzas represivas y de inteligencia para no permitir nuevas protestas. En este sentido se anunció que el Comando Conjunto ya se encuentra diseñando un plan contra la “insurgencia”.

Estas advertencias se combinan con las persecuciones políticas y la judicialización de la protesta, posible gracias al código penal aprobado durante el gobierno de Rafael Correa. Estas acciones iniciadas al día siguiente de levantado el Paro e iniciado el diálogo, da claras muestras de que el gobierno se mantiene en su estrategia represiva y busca disuadir el malestar social a partir del miedo.

4-Los medios de comunicación y la batalla por las percepciones de realidad y la construcción de discursos.

Desde el gobierno se emprendió una batalla también en el ámbito de construir discursos sobre la realidad, para ello contó con el servilismo absoluto de los grandes medios de comunicación. El primer discurso fue intentar negar a lxs sujetxs de las protestas, primero afirmando que solo eran los transportistas, luego cuando estos levantaron el paro, afirmaron y siguen haciéndolo que se trataba del correismo otorgándole una relevancia poco creíble a un sector político, que en la actualidad mantiene una simpatía bastante reducida a algunos sectores y provincias y que sin duda no tiene relación con el movimiento indígena el cual ha tenido numerosos conflictos con el gobierno de correa. A la sobrestimación del rol de Correa y el correismo, el gobierno pretendió instalar el discurso de fuerzas extranjeras venezolanas- activando una xenofobia latente-, que actuaban junto a la FARC , Latín Kings y más recientemente la idea de una operación regional dirigida desde Irán, solo faltaron los alienígenas que la esposa del presidente chileno, sumo para el caso del país hermano.

Desde el gobierno y los medios se sostuvo con tozudez que las protestas se limitaban a la ciudad de Quito, tratando de ocultar las 20 provincias movilizadas e incluso varias gobernaciones tomadas. Y por supuesto se hizo foco en los actos de vandalismo mientras los grandes medios obviaban filmar las múltiples escenas de represión policial y militar. Tras el toque de queda, en la noche en la ciudad de Quito la sonoridad de los cacerolazos inundo todos los rincones y para teleamazonas, uno de los grandes canales de televisión las cacerolas eran la forma que tenían los y las quiteñas de agradecer al presidente Moreno que ponga orden. El rol de los medios masivos de comunicación fue masivamente repudiado durante las protestas, pero a ello hay que agregar el despliegue de una gran campaña oficial en redes sociales e incluso mediante mensajes que llegan masivamente a cada persona a sus celulares, mediante los cuales el gobierno intenta desmentir el carácter de las medidas económicas y laborales.

Pero las imágenes y discursos trascendieron, llegaban desde todos los rincones dando cuenta de las movilizaciones gracias a la inmensa labor de los medios alternativos de comunicación, quienes hoy también se enfrentan a la persecución y judicialización por parte del gobierno que no les perdona haber roto el cerco mediático.

Ante el cerco mediático y la gran circulación de noticias falsas, la exigencia del movimiento indígena respecto a la trasmisión en vivo del diálogo con el gobierno establecido el 13 octubre y en el cual se negoció la anulación del decreto 833 y el fin del paro, fue muy acertada para desarmar las sospechas de enrosque y negociaciones por debajo de la mesa. La transmisión mostró un movimiento indígena firme y con un discurso claro.

5- El nivel de descontento acumulado permitió superar, al menos coyunturalmente, la fragmentación del campo popular que participo masivamente tanto en la protestas, como en la articulación de redes de solidaridad y cuidado. Las universidades Salesiana, Católica y Central abrieron sus puertas como centros de paz y acogida y ahora son acusadas por el Ministro Jarrín de funcionar como centros de operación logística para los grupos vandálicos.

Durante esos días la solidaridad tomó cuerpo en la múltiples donaciones que no pararon de llegar, personas en camionetas que se estacionaban para brindar una comida caliente, las cocinas comunitarias, la invaluable labor de paramédicos y estudiantes de medicina, guarderías y centros infantiles levantados por voluntarios y voluntarias.

La potencia y masividad del paro/levantamiento llego como una sorpresa a desafiar los diferentes análisis que mostraban un momento de debilidad y fragmentación del movimiento indígena. La indignación de las bases respecto a las medidas consiguió actuar por encima de la fragmentación y las relaciones complejas entre los diferentes sectores devolviendo al movimiento indígena su gran capacidad de movilización.

En un momento donde la fragmentación del campo popular hace difícil la presencia de liderazgos capaces de orientar el descontento el movimiento indígena despertó la expectativa de orientar el descontento masivo. Más allá de los primeros días de desorientación, los y las dirigentes indígenas comenzaron a liderar las manifestaciones incorporando también las demandas y reconociendo la presencia de los otros sectores como, las mujeres, los estudiantes, trabajadores, sectores populares urbanos, medios alternativos, entre otros.

La llegada del movimiento indígena y la recepción que tuvo al llegar a Quito, demostró que se pueden tejer de encuentros entre el campo y la ciudad y que se guarda una profunda memoria histórica de las luchas pasadas ya que muchos y muchas señalaron las manifestaciones como el segundo levantamiento indígena, haciendo referencia al primer levantamiento de los años 90.

Y ahora qué

El diálogo iniciado el 13 de octubre, se tornó insostenible, el gobierno abre causas legales contra los dirigentes opositores intenta socavar lo colectivo, ofreciendo dadivas sectoriales, e incluso mandando a un vicepresidente ilegitimo(1) a recorrer las comunidades indígenas con promesas irrisorias y locales. Al tiempo que continua con su programa económico alineado al FMI con el respaldo de las élites para lo cual presento un proyecto de Ley de Crecimiento económico el cual ya paso la fase de primer debate en la Asamblea Nacional.

En este marco es fundamental sostener la articulación del campo popular, construir demandas comunes ante los intentos del gobierno, un paso para ello fue el llamado a constituir un Parlamento de los pueblos, el cual elaboró documento con propuestas económicas que fue presentado el pasado 31 de octubre a partir del cual se instó a la Asamblea Nacional a archivar la Ley presentada por el gobierno y crear una mesa técnica que analice las diferentes opciones.

Con esta iniciativa, el Parlamento de los pueblos busca no solo articular la oposición sino también presentar propuestas alternativas a la política pro empresarial y fondomonetarista.

Mientras en las calles de Chile se está defendiendo una dignidad que no tienen que ver con el costo del transporte y en Bolivia la derecha fascista y racista se toma a la fuerza el poder, en Ecuador nos encontramos ante un horizonte similar que requiere entender que la derogación del decreto 833 fue una victoria parcial, en la cual se midieron fuerzas pero que las medidas económicas y laborales no se limitan al incremento de los combustibles y que para frenar estas medidas, queda apostar a la posibilidad de mantener la articulación y solidaridad que se vio durante los 12 días de paro.

(1) Tras el procesamiento del vicepresidente Jorge Glass por corrupción, el presidente Moreno en vez de posesionar al presidente de la Asamblea, designo como vicepresidenta a una de sus ministras, María Alejandra Vicuña quien dejó el cargo tras ser acusada también de corrupción, ante lo cual nuevamente el presidente designo a dedo a Otto Ramón Sonnenholzner un empresario, radiodifusor vinculado a los grandes medios de comunicación. De este modo, la segunda persona al mando en un cargo al que se accede mediante el voto popular hoy es ejercido por una persona que no fue elegida democráticamente.

 

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